Invertir en ropa de hogar significa ofrecerse más comodidad cada día. Sin embargo, para que estos productos fabricados con textiles de alta calidad duren, hay que saber cómo cuidarlos adecuadamente. Los profesionales tienen recomendaciones específicas para tres tipos de ropa de casa, como manteles, sábanas y toallas.
Compruebe si la ropa de cama es lavable
En el caso de los manteles, debería empezar por comprobar las recomendaciones de lavado y secado de los productos que posee. Este paso es esencial, especialmente para las fibras de calidad y los tejidos delicados.
A continuación, clasifica la ropa por material y color. Si quiere mezclar artículos con diferentes recomendaciones de temperatura. Es preferible la temperatura más baja. Si desea secar manteles de alta calidad, puede utilizar la máquina asegurándose de iniciar el programa delicado.
Si se prefiere el secado al aire libre, hay que evitar la luz solar directa y los tejidos de color para evitar que se desvanezcan. Por otro lado, las prendas blancas pueden colocarse bajo la luz directa del sol. Se recomienda encarecidamente seguir las instrucciones de la etiqueta del producto.
Además, para cuidar adecuadamente los textiles bordados, considere la posibilidad de plancharlos de adentro hacia afuera. Para prolongar la vida de los manteles y las toallas, guárdelos en un lugar oscuro y evite utilizar bolsas y fundas de plástico.
Comprueba las instrucciones antes del lavado
Al lavar la ropa de cama de Ambiances & Matières, primero debe comprobar las instrucciones de la etiqueta y clasificar las prendas que se van a lavar. Para conservar los tejidos de color y mantener su aspecto, debería considerar la posibilidad de lavarlos y secarlos del revés. Este tipo de tejido puede cuidarse con un detergente líquido sin lejía. Las sábanas y mantas blancas pueden limpiarse con polvo. Todas las manchas deben tratarse antes de la fase de lavado.
Pre tratamiento de la ropa de baño
Para lavar la ropa de baño de lujo, primero debe leer las instrucciones de la etiqueta y clasificar el artículo. Si hay manchas, considere la posibilidad de tratarlas antes. Al lavarla, evite los suavizantes que reducen la capacidad de absorción de la toalla. Las toallas bien cuidadas se mantienen suaves y cómodas al tacto durante más tiempo.
La secadora es una excelente opción para las toallas de alta calidad, ya que restablece su absorbencia y flexibilidad. Sin embargo, los profesionales desaconsejan planchar las toallas.